Mientras esperaba a Miguel, recorrí con la mirada el lugar en el que me encontraba e inspeccioné unas pequeñas celdas en las que se encontraban los caballos. Sin querer, me percaté del apareamiento de una yegua y un caballo, pero lejos de apartar la mirada, no pude evitar admirar la sumisión de la hembra blanca ante su enorme semental de pelaje negro, quien estaba descargando todo su potencial sobre ella.
A pesar de obtener una vista maravillosa de mi semental, todavía quedaba un detalle que acentuaba perfectamente el conjunto: su largo, grueso, venoso y erecto mástil, decorado con dos enormes y gordas bolas cubiertas de vello, que se escapaban de ahí donde las chaparreras no cubrían.
semental follando una yegua
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Aquel momento era perfecto: estaba complaciendo a un semental ejemplar sobre el cofre de una camioneta de rancho en medio de la nada. Casi podíamos pasar por un par de animales en pleno apareamiento, camuflándonos entre los muchos que habían en el rancho.
Mientras Miguel me cogía a velocidades envidiables, mi mente abandonó mi cuerpo y me concentré únicamente en besar a mi macho complaciente. Sus testículos golpeaban mis nalgas con cada embestida y mis intestinos se revolvían cuando la cabeza hinchada de su verga se clavaba en mi próstata. La camioneta se movía al compás de mi semental y hacía ruidos extraños mientras me sujetaba a sus gruesos brazos, luchando por soportar las embestidas de un caballo desesperado.
En el silencio de la noche, los gruñidos de lo que parecía un gato resonaron. Con la mente nublada por la excitación no me esforcé un buscar el origen del sonido, pero no tardé en notar que provenía de mi mismísimo pecho, justo de la garganta de mi semental. Aquellos ronroneos presagiaban el gran final de nuestro apareamiento y me hacían situarme en la posición de una hembra en celo a punto de ser preñada En ese momento supe que el caballo y la yegua que había visto al llegar a este lugar éramos Miguel y yo.
No es para todo el mundo. Los mercados sexuales de potros y yeguas han irrumpido en España con unas reglas para el sexo en grupo jamás vistas en el país. La próxima de estas orgías medievales o Fickstutenmark --pues su origen es alemán-- tendrá lugar en Barcelona el próximo 2 de octubre. Las reglas? Sementales que eligen y montan a monturas cegadas con una capucha que no saben quién se encarama sobre ellas.
Lo explican los organizadores de la Stud & Mare Market, que se celebrará en un local del Gaixample --barrio gay-- de la Ciudad Condal. "El formato consiste, básicamente, en una experiencia basada en roles: dominante/sumiso o semental/yegua. En este formato no es posible la versatilidad. Te inscribes como yegua --rol pasivo sumiso-- o como semental --rol activo dominante--", detallan.
Lo diferencial con otros eventos de sexo en grupo es que las yeguas llevan capucha. No saben quién las monta, esto es, tienen sexo a ciegas con los hombres que las eligen, tantos como se encaprichen de ellas. Cuando el solo sí es sí es más importante que nuca en España, incluso con una ley, cómo consentirán? "La participación en el encuentro implica la aceptación de sus normas [...] una de ellas es que las yeguas no pueden rehusar una monta, si bien la pueden dar por acabada en cualquier momento", explican los impulsores, que pertenecen a la asociación Sexo en Grupo Barcelona.
Pero hay más. Los hombres enmascarados, cegados de toda visión, son expuestos como si de una feria medieval se tratara. Una suerte de mercado de ganado. Los sementales miran a sus objetivos, los repasan y eligen si mantener relaciones con ellos o no. Es una fiesta de la lujuria con dos roles diferenciados en la que todo el mundo --adultos, por supuesto-- participa por voluntad propia. "El formato gira alrededor del morbo de la dominación/sumisión recreando un mercado de yeguas, donde son exhibidas y puestas a disposición de los sementales para su monta", admiten quienes lo organizan.
Los chicos de establos también puntuarán a los sementales y su monta en base a sus "observaciones durante el mercado". Al final de la velada se elegirá a los que mejor han dado y a los que mejor han recibido. Habrá un potro ganador y la yegua más cumplidora. De nuevo, reminiscencias del medievo.
En Barcelona, donde solo había 50 plazas en la primera edición de 2022, sí. La mitad eran para ser semental y la otra mitad, para ser yegua y mantener relaciones a ciegas. "Despertó mucho interés", reconocen, antes de agregar que en octubre se superará esa cifra, pues "los asistentes a la primera edición quieren repetir mayoritariamente; los que no pudieron venir en mayo, esperan ser seleccionados en octubre y los que han sabido del encuentro recientemente también tienen curiosidad".
Sin un ápice de romanticismo, al final del evento no habrá bodas, pero sí buen rollo. Es lo que pretenden los organizadores, que aseguran que "es responsabilidad de la organización procurar que el grupo sea coherente y que los participantes sean personas que se cuiden mínimamente, ya que al final del mercado las yeguas se deprenderán de su saco de tela y todos los participantes se conocerán por fin".
Para ello hacen una "selección" previa de participantes para "garantizar un grupo diverso pero coherente". Que nadie se equivoque, pues esta fiesta no es para disertar sobre filosofía. "Como en cualquier mercado, se trata de ver el género expuesto y probarlo, de modo que los sementales deben montar al máximo número de yeguas para poder valorarlas. Al final del encuentro y mediante un sistema de votaciones se elige a la mejor yegua y al mejor semental", insisten.
En cualquier caso, en el Stud & Mare Market "las yeguas con saco blanco son montadas con preservativo y las yeguas con saco negro, sin preservativo". Si una yegua quiere, solo tendrá sexo con protección. Pero si no quiere, si desea lo que popularmente se conoce como sexo a pelo, también lo podrá hacer. No asusta el pico de casos de la viruela del mono? "Las autoridades sanitarias han empezado la campaña de vacunación por el colectivo más afectado y vulnerable [el LGTBI]. De modo que en breve dejaremos de ser el colectivo más afectado para ser el más inmunizado", defienden mientras preparan los establos de Barcelona con suma discreción. Porque la feria se acerca y la quieren celebrar con la máxima reserva. 2ff7e9595c
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